Cómo soportar a tu humano. Consejos prácticos.
Nuestro bienestar es su prioridad. Nos alimentan, limpian y llenan la bandeja y nos miman. No nos podemos quejar. O sí.
Algunos de vosotros, al igual que yo, habréis detectado que nuestro humano no sale de casa. Este comportamiento atípico puede resultar entretenido al principio, pero al cuarto día es santo de nuestra desesperación. Necesitamos nuestro tiempo y espacio para asearnos y poder hacer nuestras habituales travesuras.
Yo, como gata experta del equipo de MYTA en calidad de arenas y control de olores y humedad, os doy algunos consejos para aguantar a vuestro humano estos días:
- Ignórale. Siempre que tengas el cuenco lleno, no te acerques a él ni establezcas contacto visual. Si él se acerca, tú puedes alejarte.
- Busca un escondite. Necesitamos nuestro espacio sin que nos acaricien constantemente en nuestras 4 siestas diarias. Un armario cerrado suele ser la mejor opción, aunque las cajas y maletas también suelen ser bastante confortables y seguras.
- Deja pelos por toda la casa. Esto no es nada nuevo. Pero estos días en los que no disfruta del ocio humano, se entretendrá limpiándolos y podremos disfrutar de un rato de tranquilidad.
- Interrumpe sus periodos de sueño. Lo ideal es despertarle a media noche. Puedes saltarle encima, morderle un pie o darle en la nariz con las patitas. La idea es que el día siguiente lo pase agotado en el sofá y podamos pasar desapercibidos.
- Cuidado con los niños. Nuestra principal amenaza estos días. Están especialmente aburridos y son propensos a tirarnos de la cola y los bigotes. Dado su menor tamaño, la mejor opción es atrincherarse a lo alto de una estantería.
Una mayor tranquilidad, sumada a un ambiente limpio y sin mal olor, hará que nos sintamos felices y contentos.